Psicomotricidad en la infancia, movimiento y desarrollo cognitivo.
La psicomotricidad es la técnica que ayuda a niños, niñas y bebés a dominar sus movimientos corporales de una forma sana, así como mejorar su relación y comunicación con los demás, su beneficio principal es el fortalecimiento de la salud física y mental. De tal manera es importante debido a que resalta la importancia de que el niño pueda moverse libremente.
La actividad motriz permite el desarrollo del niño a nivel psicológico, fisico y social a través de la misma, es por esto que se utiliza al cuerpo como elemento de contacto con el entorno. Por otra parte, el objetivo final el lograr que los niños y las niñas aprendan a percibir las cualidades de su entorno, así permitirá el desarrollo básico de las capacidades en su integración escolar y social.
El progreso de un niño en su psicomotricidad le permite que sea capaz de controlar mejor sus movimientos e impulsos emocionales, así como una mejor adaptación al medio social, familiar y escolar. El desarrollo de la psicomotricidad lo podemos desglosar en tres partes:
A nivel social y afectivo: permite a los niños conocerse mejor ellos mismos, afrontar sus miedos y relacionarse con los demás.
- Los patrones del movimiento están clasificados de la siguiente manera: Básicos de 0 a 18 meses: Control cefálico, cambio de decúbito, posición sedente, de sedente a decúbito prono, reptación o arrastre, de sedente a cuatro puntos y gateo, de posición de cuatro puntos a hincado, de hincado a bipedestación, de marcha.
- Maduros de 18 a 3 años: Marcha, carrera, salto.
- Manipulativos: de 3 a 6 años: en esta etapa los niños empiezan a dominar los objetos sobre sus cuerpos, tales movimientos como arrojar, atajar y patear.
- De perfeccionamiento de 6 años en adelante: Carrera, salto largo, salto en un pie, salto con obstáculos, galope, arrojar, atajar, patear, golpear, rebotar, rodar, entre otros.
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